Cirugías Estéticas

Rinoplastía: intervenciones de nariz

La rinoplastia está a la vanguardia de los procedimientos faciales en todo el mundo, así lo señalan las estadísticas que registran millones de operaciones de nariz cada año, ocupando el quinto lugar de todas las operaciones estéticas combinadas. Se trata de un método quirúrgico que implica la remodelación de la nariz, que ha evolucionado considerablemente en los últimos años. Si tienes pensado corregir algunos defectos en la nariz, deberás saber primero, todos los aspectos importantes sobre la rinoplastía.

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¿En qué consiste la rinoplastía ?

Se trata de un procedimiento quirúrgico que tiene como objetivo cambiar o corregir algún aspecto interno o externo de la nariz. Existen dos tipos de procedimientos que son:

Funcional : es un tipo de cirugía de reparación otorrinolaringológica, que consiste en enderezar el tabique nasal de personas que presentan algunas dificultades para respirar.

Correctivo : es una cirugía plástica de orden estrictamente estético, que consiste en cambiar la morfología de la nariz a nivel de los huesos superiores o del cartílago.

Aunque aparentemente tienen diferentes objetivos, estos dos tipos de rinoplastía, se pueden realizar al mismo tiempo, en los casos de pacientes que tienen ambas necesidades.

Edad apropiada para practicarse una rinoplastía

Una rinoplastía correctiva, es decir, por motivos estéticos, se puede llevar a cabo a partir de los  14 años de edad en las hembras y los 16  en los varones ; de esta forma, el cirujano tiene la seguridad de que el hueso de la nariz ha crecido casi un 90%.

Muchas personas aprovechan este procedimiento para arreglar también el mentón y crear un efecto armónico con la nariz. En el caso de una rinoplastía funcional, la edad no tiene un límite para practicar el procedimiento, sino cuando las necesidades de salud, así lo ameritan.

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Recomendaciones antes de la cirugía

Para conseguir un resultado óptimo, las citas médicas preoperatorias son esenciales antes de llevar a cabo cualquier procedimiento de cirugía estética. En el caso de una rinoplastía, las entrevistas previas con el médico, permiten al paciente expresar exactamente sus expectativas ; el médico por su parte, puede sugerir otros cambios.

Rinoplastía cirugía de la nariz
Rinoplastía cirugía de la nariz

Cambiar el rostro no es nada trivial, y la nariz conforma uno de los aspectos más significativos, ya que cambia la armonía general de las características y éstas resaltarán las facciones de manera diferente, como la apariencia, la boca e incluso el mentón. Para garantizar el mejor resultado, el médico puede realizar algunas simulaciones mediante fotos que ayudarán al paciente a familiarizarse con lo que sería su nueva apariencia del rostro.

¿Cómo es el procedimiento?

En todos los casos, el procedimiento para llevar a cabo una rinoplastía varía, dependiendo del objetivo : si se trata de una reducción del hueso, de algún bulto o cartílagos, la intervención tiene una duración entre 1 y 1 hora y media. En otros casos más complejos, como una reconstrucción general por algún accidente, etc. el procedimiento requerirá de más tiempo.

Cuando se practica una rinoplastia estética que busca corregir un golpe de la nariz demasiado visible, el cirujano debe eliminar el exceso de hueso. El espacio creado por la eliminación de la joroba se oprime no sólo para que la nariz se vea erguida y adopte una forma excavada según los efectos buscados, sino para que también resalte más el perfil.

La mayoría de los cirujanos tienen preferencia por la anestesia general para llevar a cabo una intervención por rinoplastía, por ser más segura y menos traumática para el paciente.

Tipos de técnicas

Este tipo de cirugía, incluye dos tipos de técnicas y ésta dependerá del problema o la irregularidad que el cirujano y el paciente quieran corregir.

Reconstrucción de nariz con rinoplastía
Reconstrucción de nariz con rinoplastía

Si el deseo del paciente es cambiar el aspecto de la nariz en su punta, el cirujano considerará varias técnicas apropiadas: la reducción de cartílago alar, el cual forma la punta de la nariz, la sutura entre los cartílago, o la adición de injertos de cartílago.

Cerrada :  es la técnica más utilizada, ocurre cuando las incisiones se realizan por dentro de los orificios nasales, por lo tanto, las cicatrices o marcas en este caso, no son visibles.

Abierta : esta técnica requiere de una pequeña incisión en la división de los dos orificios nasales y deja una pequeña cicatriz en la columela, que sólo el paciente puede percibirla al buscarla muy bien. Es totalmente necesaria cuando la punta de la nariz, es la zona que requiere un mayor cambio.

Postoperario

Generalmente se trata de una intervención ambulatoria y el tiempo de estadía en la clínica se encuentra alrededor de una y tres horas después de la operación. La duración del postoperatorio dependerá del tipo de rinoplastia que se haya practicado el paciente, sin embargo, ésta varía entre 8 y 15 días.

Este procedimiento quirúrgico, puede dar lugar a dolores de cabeza, dificultad para respirar y la aparición de algunos hematomas transitorios.

En caso de dolor se recomienda el uso de ibuprofeno, pero si éste se vuelve persistente, es necesario consultar al médico de inmediato, ya que puede estar presente una infección. En este caso es apropiado contar con un plan de salud de Casa Sistema Asistencial.

Recuperación

El área de la nariz seguirá siendo frágil durante un mes. Por lo tanto, es aconsejable evitar practicar cualquier actividad brusca, especialmente deportes de riesgo. A los cinco días siguientes después de la intervención, el individuo puede retomar sus actividades laborales o escolares, que no requieran ningún esfuerzo físico importante.

Para retomar los deportes físicos intensos, se requiere al menos de tres semanas o un mes de reposo. En el caso de exposición al sol o ir a la playa, es aconsejable dar tiempo a que desaparezcan los hematomas del rostro totalmente, ya que éstos pudieran dejar una mancha oscura en la piel.

Resultados finales

Una vez que se retira el yeso los cambios ya son evidentes, sin embargo, los efectos finales no podrán notarse todavía porque tanto la nariz como el área cercana, está inflamada, lo cual distorsiona en gran magnitud los resultados.

Transcurridos los dos meses, después de la operación, los efectos ya son visibles casi en un 70%  aunque aún queda un resto de edema sin reabsorber.

Si bien los primeros resultados satisfactorios son visibles a las dos semanas, el resultado final es realmente apreciable sólo después de transcurridos seis meses o incluso hasta un año.

¿Cuáles son los riesgos?

Los riesgos de llevar a cabo una rinoplastía aumentan o disminuyen dependiendo de las previsiones que el paciente tome. En primer lugar, es importante saber escoger un buen cirujano, preferiblemente por recomendaciones de otros pacientes que se hayan practicado una cirugía similar y por la experiencia que el médico posea, etc.

Adicionalmente, es importante tener en cuenta que las simulaciones en fotos de perfiles que el cirujano realiza antes de la intervención quirúrgica, se acercan al resultado final, sin embargo, las del rostro no siempre resultan ser muy confiables.

Por otro lado, la textura de la piel y la fisionomia juegan un papel importante en el resultado final. Por ejemplo, en el caso de cambios drásticos, no es posible obtener una nariz pequeña y delgada con una piel gruesa. El mismo efecto surge cuando la persona posee rasgos toscos con fosas nasales grandes.

Costo aproximado de una rinoplastía

El costo promedio de una intervención como la rinoplastía, para fines estéticos, oscila entre 2.500 y 4.500 dólares, dependiendo de los resultados que se busquen, la duración del procedimiento, el tipo de intervención y los honorarios médicos. En este enlace te podemos orientar a conseguir un mejor uso de tu prepaga de Mutual Médica para cualquier fin.

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Rinoplastía estética

Ubicada en el centro del rostro, la nariz puede ser un gran complejo para muchas personas. Es por eso que la rinoplastía es una de las cirugías estéticas más solicitadas. Esta, consiste en un procedimiento quirúrgico que apunta a cambiar el tamaño y la forma de la nariz (según corresponda) para brindar al rostro un aspecto más armónico. Hoy hablaremos en detalle sobre el procedimiento de la Rinoplastia Estética.

¿Qué debo saber sobre la rinoplastía estética?

En la actualidad, se considera a la rinoplastía estética como la cirugía estética más compleja y más desafiante para los cirujanos que la realizan. Esto tiene que ver con que es el momento en que se ponen en juego tanto la técnica que éstos puedan tener para lograr buenos resultados y sin riesgos, como también la visión “artística” y sensible que puedan presentar para saber dar con los objetivos del paciente al momento de moldear su nariz. En este sentido, podemos decir que la rinoplastía es una cirugía estética que combina necesariamente todas la competencias que un cirujano pueda tener.

Algo que cabe destacar es que, hoy en día, la rinoplastía tiende a buscar un tipo de nariz que siente bien al rostro en el que va a mantenerse, pero sin buscar prototipos de narices ajenas. Al mismo tiempo, se presta mucho énfasis en que la nariz que quede luego de la cirugía se vea natural y no se note en ella una operación. Son cada vez más los especialistas que apuntan a lograr un resultado natural, en donde no se note el paso por un quirófano.

Es frecuente considerar bella y agradable una nariz en la que notamos equilibrio en sus formas. Hoy en día los avances en la cirugía estética de nariz permiten modificar el aspecto de casi cualquier nariz, de modo de ofrecer este equilibrio buscado por muchos pacientes.

Cirugía Rinoplastia Estética
Cirugía Rinoplastia Estética

¿Quiénes se realizan o pueden realizarse una rinoplastía estética?

Hoy, más del 80% de las personas que acuden a un procedimiento de rinoplastía estética lo hacen porque quieren mejorar el aspecto general de sus rostros. Es por esto que en este caso hablamos de rinoplastía estética y no de rinoplastía funcional.

En cuanto a las condiciones que una persona debe presentar para poder acudir a este procedimiento, destacamos las siguientes:

– No ser fumador.

– Tener un crecimiento facial completo (es decir, es un procedimiento que no puede realizarse en niños que están en edad de desarrollo)

– Tener un estado físico saludable

– Tener metas realistas de mejora del rostro y expectativas saludables respecto al proceso

En lo que respecta a quiénes son las personas, por lo general, que acuden a este tipo de procedimiento, se destacan los siguientes perfiles:

– Tener un tamaño de nariz que se considera desproporcional al rostro en general (demasiado grande o demasiado pequeña);

– Tener desviado el tabique;

– Tener muy prominente en alguna parte el puente de la nariz;

– Tener la nariz torcida o fuera de ángulo;

– Que el ancho de la nariz sea muy importante y notorio;

– Que las fosas nasales sean demasiado estrechas o demasiado anchas;

– Que las fosas nasales estén caídas, sobresalgan o sean desiguales.

El antes, el durante y el después de la operación

Antes de tomar la decisión de acudir a una rinoplastía estética, es importante conocer los procedimientos que la componen. Por eso, vamos a contarte el antes y el después de la operación.

El antes: pre-operatorio

Toda rinoplastía estética requiere de una preparación previa del paciente. Hay ciertas condiciones que deben tomarse en cuenta y cumplirse si se quiere que el proceso se desarrolle de manera exitosa y sin problemas. Algunos de los preparativos que muchos especialistas tienden a recomendar, son los siguientes.

Mantener una dieta saludable

La recuperación luego de la operación dependerá también de los hábitos alimenticios que hayamos mantenido durante el tiempo previo. Por esto, es importante tener una dieta balanceada, pero alta en proteínas. También son recomendables los alimentos que sean ricos en vitaminas A y C. En cuanto a qué alimentos evitar, esto será pautado previamente con el especialista en cuestión, para cada caso particular.

Dejemos de lado el tabaco y el alcohol

No se pide que no se haya fumado nunca ni bebido alcohol jamás. Sin embargo, muchos especialistas tienden a recomendar evitar estos dos elementos por lo menos dos semanas antes del procedimiento. Esto tiene que ver con que tienden a interferir con el flujo sanguíneo, impidiendo que el oxígeno pueda circular con fluidez y rapidez por el cuerpo y, especialmente, por las zonas a tratar.

Asimismo, las personas que llevan un tiempo siendo fumadoras activas, es probable que tengan un proceso de recuperación más largo que el de alguien que no tiene ese hábito.

Analizar bien los medicamentos

Es frecuente que acudan a una rinoplastía estética personas que toman medicamentos habitualmente por diversos motivos. En estos casos, es fundamental que estos pacientes se comuniquen permanentemente con su cirujano y dejen en claro con éste qué es lo que toman. Es probable que, para estos casos, el cirujano le prescriba al paciente una alternativa temporal, que interfiera menos con lo que es la cirugía. Esto tiene que ver, mayormente, con que algunos medicamentos pueden particularmente interferir con el proceso de recuperación, tal cual debiera realizarse.

Si bien es cierto que el tema medicamentos debe ser tratado con cada cirujano en particular, los que suelen evitarse para estos casos son: los anticoagulantes, el ibuprofeno y la aspirina, entre otros.

¿Cómo es el procedimiento?

Como con casi todas las cirugías estéticas, la rinoplastía parte de la aplicación de la anestesia. Esta, puede ser local o general. Una vez efectuada, el cirujano procederá a realizar pequeñas incisiones (generalmente dentro de las fosas nasales). Es a partir de estas incisiones que se logra tener acceso a un sencillo levantamiento de la piel. Con la piel levantada, podrá acceder al hueso de la nariz y al cartílago. Una vez allí, se facilitará el proceso de remodelación que brindará los resultados esperados y pautados con el paciente.

Hay ciertos pacientes con los que es posible que se requiera también hacer injertos o retiros de tejidos. En estos casos, el cirujano cuidará de alterarlos lo menos posible, para lograr un aspecto natural.

Una vez finalizadas las modificaciones necesarias, se procede a bajar nuevamente la piel. Al bajarla, se la debe moldear a los nuevos rasgos de la nariz, procediendo finalmente a cerrar todo con puntadas y envolver la zona tratada en su totalidad.

Finalmente, es probable que el cirujano coloque en la nariz una férula, que es la que asegurará las modificaciones hechas en la nariz y las reforzará, para que no se pierdan durante los primeros días. Hay casos en los que se recomienda también colocar gasa dentro de las fosas nasales, para brindar fuerza al tabique en la recuperación.

El después: la recuperación

Resultados de una Rinoplastia
Resultados de una Rinoplastia

Además de descansar adecuadamente, hay ciertas recomendaciones que tienden a hacerse luego de una rinoplastía estética, para no alterar los resultados y que la recuperación se efectúe correctamente y sin problemas. Algunas de ellas, son:

– Cambiar la gasa tanto como el cirujano lo haya indicado;

– Evitar la ropa que tenga que pasar por la cabeza para ser puesta o retirada;

– Evitar los estornudos y no sonar la nariz;

– Tratar de tener la cabeza elevada la mayor parte del tiempo, incluso para dormir (esto puede hacerse colocando almohadas de forma de lograr una posición cómoda para dormir sentados);

– Evitar los alimentos que requieran más esfuerzo para masticarse o que sean duros;

– Usar compresas frías según indique el cirujano;

– Tener cuidado al cepillar los dientes, de no hacerlo con fuerza.

Se estima que, en general, son dos las semanas que deben pasar para que el paciente pueda retornar a su vida habitual y a su trabajo. Sin embargo, hay ciertas cosas que aún deben evitarse, como:

– Hacer trabajos que requieran el uso de la fuerza o un gran esfuerzo físico;

– Evitar usar todo tipo de anteojos, ya que pueden lastimar el tabique;

– Tratar de no consumir prácticamente sodio durante las semanas posteriores, ya que puede favorecer la hinchazón;

– Usar permanentemente filtro solar, con factor superior a 30.

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Riesgos y efectos temporales

Como todo procedimiento quirúrgico, no podríamos decir que la rinoplastía no conlleva riesgos. Si bien son poco frecuentes, algunas de las complicaciones que pueden llegar a sufrirse tras este tipo de operación son: hematomas, infecciones, hemorragia nasal, reacción alérgica a la anestesia, problemas respiratorios, resultados desfavorables y cicatrices notorias. Todo esto debe ser charlado previamente con el doctor en cuestión, para ver la manera de evitar estas complicaciones y tener plena conciencia antes de tomar la decisión.

Por su parte, hay ciertos efectos temporales que pueden venir luego de este tipo de procedimiento, pero que tienden a desaparecer con el paso de poco tiempo. Entre esos efectos temporales, podemos encontrar:

– Moretones que desaparecerán al cabo de aproximadamente unos diez días;

– Hemorragia leve durante las primeras 72 horas;

– Dolor e inflamación, que tienden a ser controlados con medicación específica (siempre debe ser ésta recetada por el cirujano);

– Síntomas de sinusitis, entre los que encontremos una alteración leve y temporal de la voz y la inflamación de los conductos nasales;

– Mareos y fiebre tras pasarse el efecto de la anestesia.

El cirujano determinará la mejor manera de evitar lo más posible este tipo de efectos, pero deben seguirse al pie de la letra sus indicaciones.