El Tai Chi consiste en un tipo de arte marcial cuyos fines son enteramente terapéuticos. Esta disciplina es originaria del Imperio Chino y su práctica suele relacionarse con la búsqueda de un equilibrio, tanto físico como psíquico. En este artículo exploramos los beneficios, orígenes, y técnicas del Tai Chi.

¿En qué se basa el Tai Chi?

El Tai Chi forma parte de la conocida Filosofía de la Naturaleza propia de China, por lo que se vincula también con otros conceptos como el del Ying y el Yang y el Chi.

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El Tai Chi se basa, además, en un principio de suavidad. Las personas que lo practican deben moverse de manera suelta, fluida, relajada y natural, sin forzarse demasiado. El Tai Chi no es una práctica que lleve uso de la fuerza, como así tampoco de endurecimiento ni de rapidez. El Tai Chi es un ejercicio que exige lentitud.

¿Cómo se realiza el Tai Chi?

Hoy en día, son cada vez más las personas que deciden hacer de esta práctica la compañía ideal de sus días para alcanzar ese deseado equilibrio físico y psíquico.

Son muchos los motivos por los que este arte marcial se ha ido popularizando con el correr de los años. Algunas personas lo utilizan como método terapéutico y medicinal, mientras otras como ejercicio de relajación o como complemento de la meditación. Al mismo tiempo, entre los jóvenes, ha ido adquiriendo cada vez más importancia el rol de esta práctica como competencia.

El Tai Chi cuenta con una gran variación de estilos y técnicas. En muchos casos, se aplican movimientos individuales, ejercicios de respiración y de postura, como así también otros de meditación. Estos permiten que se suelten las articulaciones a lo largo del cuerpo, relajando a éste y educando la postura de modo de que, a medida que el tiempo pase, logremos adquirir una manera que nos favorezca y no nos genere malestares ni dolores.

Este ejercicio se basa, básicamente, en realizar una serie de formas que consisten en secuencias de movimientos. Por lo general, la mayoría de estas formas que el practicante debe realizar se asemejan a las adquiridas para “luchar” contra un oponente imaginario.

Las formas que los practicantes de Tai Chi realizan están compuestas por una serie de “cuadros” o de posturas cuya secuencia está ya predefinida. Estas posturas son reconocidas, además, porque llevan nombres que amplifican la tarea que debe realizarse: un claro ejemplo de ello es “la patada del talón derecho”.

De todas maneras, no todas las actividades que componen la práctica del Tai Chi se realizan de manera individual. En muchos casos, los instructores de este arte marcial medicinal hacen a los practicantes realizar ciertas formas de a dos personas, que es lo que más podría asemejarse al combate.

Por otro lado, si bien la mayor parte de las prácticas del Tai Chi se llevan a cabo sin armas, existen formas que implican la utilización de las mismas. De todas maneras, sólo los alumnos más avanzados y con experiencia en la práctica suelen tener acceso a la utilización de armas. Algunos de estos elementos que pueden ser usados en el Tai Chi son:

• La lanza
• El sable chino
• La espada china
• La vara
• El abanico

Beneficios del Tai Chi

La práctica del Tai Chi es recomendada para todas las personas, sin demasiada diferenciación por edades ni tampoco por sexo. Esta recomendación se basa esencialmente en los importantes beneficios que de ella devienen, tanto a nivel físico como psíquico.

Si tuviésemos que establecer una clasificación acerca de los beneficios del Tai Chi para las personas que lo practican, podríamos dar dos grandes categorías:

• Las mejoras a nivel físico
• Un mejor control de la energía

En lo que respecta al control de la energía, la filosofía china establece que la energía es un elemento vital en nuestro bienestar, tanto físico como emocional. Es fundamental que la energía fluya de manera correcta a través de los meridianos que cruzan nuestro cuerpo. Esta fluidez es prácticamente la responsable de que podamos sentirnos bien, o mal en caso contrario.

En relación con ello, podríamos decir que el Tai Chi consiste en una técnica esencial para poder localizar y canalizar de manera adecuada y favorable la energía vital de nuestro cuerpo y organismo. Es de esa manera que podríamos llegar a alcanzar el equilibrio perfecto entre nuestro plano físico y nuestro plano psíquico.

Por otra parte, en lo que refiere a las mejoras a nivel físico – dejando fuera, por un momento, la filosofía china – es indiscutible que, tratándose de un arte marcial, el Tai Chi trae consigo importantes mejoras y beneficios a nuestro cuerpo, tanto en el tiempo inmediato como así también a largo plazo. Algunos de estos beneficios físicos esenciales que devienen de la práctica del Tai Chi, son:

• Reducción significativa de los niveles de ansiedad y de estrés
• Ayuda a combatir la artritis y otros problemas tanto musculares como articulares
• Favorece la flexibilidad de nuestro cuerpo
• Ayuda a tener un mejor control de la respiración (lo cual, a su vez, es útil para complementar esta técnica con la meditación)
• Estimula el sistema cardiovascular y permite controlar mejor el nivel de presión arterial

Si estás pensando en adentrarte en el mundo de la medicina alternativa, el Tai Chi puede significar una excelente opción que, combinada con otros tipos de tratamientos, puede dar lugar a cambios y mejoras significativas en tu salud y calidad de vida.

Y vos, ¿ya probaste practicar el Tai Chi?